Imagenes en Celeste

martes, 29 de mayo de 2007

NO TAN SOLO UN PEDAZO DE TELA...

Llevaba años yendo al estadio varios ya, había visto pasar muchos jugadores, y si bien siempre quise hacer un lienzo, por distintas razones nunca hice uno, en el colegio los diseños en mis cuadernos sobraban para estamparlos en una tela, y en la universidad igual, incluso cuando me fui a vivir a stgo, me dijeron de que color quieres las cortinas, lógico Celeste, pensando que aquellas cortinas terminarían irremediablemente en el alambrado del Mundialista.

Reconozco que hacer un lienzo no es complicado, pero aun no le encuentro un motivo lógico al no comprar tela y pintarlo y listo, quizás por todo lo que complique el asunto y porque esas telas me acompañaron un año entero, el cariño a ese lienzo era tanto, el lienzo en si era básico, mis dotes manuales no son los mejores y aunque coopere en la hechura de varios lienzos, pintar un lienzo a las 11 de la mañana sabiendo que jugamos a las 4, como que complica un poco.

Y ese pedazo de tela me acompaño a muchas partes, en viajes helados era el que me protegía del frió, en si yo y lienzo ya éramos uno solo, y si la verdad el lienzo era feo, pero como quería a esos 4 metros de tela, hasta que un día, en realidad noche de febrero año 2003 y una barra rival saca el lienzo de la reja, la verdad ni pensé que iba a pasar eso, era un amistoso de verano, además ni cache cuando sacaron el lienzo, en esos momentos estaba abajo de la galería...

El tema es que ni lo pensé y me infiltre en la barra contraria, decisión weona, impensada, arriesgada, pero necesaria para la finalidad de rescatar aquel pedazo de tela que tanto significado tenia para mi, al cabo de unos minutos me encontraba cantando con quienes habían robado el lienzo, al rato ya había dicho que era de estación central y había acordado volver con ellos a la capital, si bien había desconfianza en ellos, al menos note que no portaban nada raro como cuchillos u otro lo que me tranquilizo, termino el partido y todos enfilamos rumbo a carretera el cobre, en el monumento a Frei los grupos se dispersaron, el grupo del cual yo era parte era integrado por tres hombres y una mujer, ahí ya en el comienzo del camino al mineral éramos prácticamente los únicos que quedaban, por suerte no me tope con ningún conocido que me saludara y abortara todo el plan.

La intención de ellos era quedarse en Rancagua toda la noche, por lo que tenia bastantes horas para volver a tener conmigo mi trapo, pero recordaron que al entrar al estadio les habían quitado no se que, y decidieron ir dos de los hombres y la mujer a buscar a la entrada de Almarza lo que supuestamente iban a recuperar, y ahí se dio la oportunidad quede yo y uno de los integrantes del grupo, y la verdad parece que era primera vez que quitaban algo porque andaban con miedo de que los pacos lo vieran con el lienzo del equipo contrario y decidió ocultarlo en el jardín de una casa de la calle Pedro Valdivia, en el momento que tira la bolsa con el lienzo, me la juego y meto la mano por entre la reja y recupero el lienzo, es decir lo tenia conmigo, un par de combos y empujones y a correr por la población Isabel Riquelme con las pulsaciones a mil, deje de correr recién en Barrio el Tenis a la altura de Gamero, momento en el cual me comunique con mis amigos.

Ya junto con ellos, me recriminaron por ser tan arriesgado, pero teníamos el lienzo de vuelta con nosotros, es decir la parte que se robaron, luego el lienzo se coció y estuvo presente toda esa temporada 2003 y la del 2004, recién el 2005 fue reemplazado por uno nuevo.

Ese lienzo la ultima vez que lo vi, lo vi por el sector del Arca, porque quedo en la sede y Víctor seguramente lo llevaba al estadio.

Quizás muchos de la barra sabían esta historia, muchas veces se aburren cuando alguien la quiere saber y la cuento, pero sirve para graficar que un lienzo no es tan solo un pedazo de tela, es el estandarte en el cual están los colores de tu club y tu expresión de cariño hacia a él.

Saludos a los pasantes y OHi OHi.

2 comentarios:

Unknown dijo...

Recuerdo esa historia, contada tal cual en una que otra conversación de esas "manolescas".
Heroíca historia que grafica "la pasión y locura", cual anécdota de Marcelo de los Stones.
Pensar que ahora hay giles que ahora se creen barrabravas y su valentía llega a tirar piedra a 40 metros.
Un abrazo amigo, le doy gracias a Dios porque O'Higgins tiene hinchas como tu...

Anónimo dijo...

Oh que historia, la cago... Yo no me atreveria a hacerla, o quien sabe. Pero se me hizo recorta, creo que una vez te escuche contarla en el estadio. Es una de esas historias que quedan de por vida, para contarsela a los nietos.

Paranoico